Una visión desprevenida sobre el crecimiento de Bogotá

“Esta breve introducción intenta explorar los orígenes y tendencias de la forma urbana de Bogotá a través de su historia. En ella se trata de evadir la tentación que siempre tienen los Arquitectos-Urbanistas de evaluar la calidad del desarrollo urbano, teniéndose solo como propósito el observar el comportamiento físico de la ciudad. En los planos ilustrados se puede contemplar como Bogotá se consolidó alrededor de una plaza desde 1538 hasta 1890, época en la cual aparecieron nuevos desarrollos al norte (Chapinero y Usaquén, al occidente (Fontibón, Engativá y Suba) y al sur (Bosa). ¿Qué motivó el desarrollo de estos núcleos? El único elemento nuevo que aparece en los planos lo constituyen las vías y el ferrocarril, así que una explicación simplista podría ser el que éstos se conformaron alrededor de una comunidad indígena o de la prestación de un servicio a los usuarios de los caminos. Por ejemplo, Suba aparece al construirse dos vías: la de Engativá-Zipaquirá, y la derivación Suba-Bogotá, con intersección en ese punto. La etapa anteriormente referida tomó 352 anos en producirse; lo que sucedió en los siguientes 20 anos debió asombrar a los bogotanos, ya que el distante Chapinero se incorporó a la ciudad, creándose un pequeno centro, rival potencial de la Plaza de Bolívar. ¿Cuáles fueron las determinantes físicas de este desarrollo? Nuevamente fueron vías; en este caso la Carrera 7a. y la Avenida Caracas. Pasaron otros 30 anos y Bogotá ya no fue la misma. La ciudad anteriormente monocéntrica y tímida en su expansión se abalanzó sobre el incipiente centro de Chapinerq, limitando el ferrocarril del Norte su avance hacia el occidente. (Comparar mapa 1940 con el de 1910).”