Social Security: A Means of Savings Mobilization for Economic Development (La sécurité sociale, moyen de mobilisation de l'épargne au profit du développement économique) (El seguro social y la movilización del ahorro para fines de desarrollo económico)

La première partie de cette étude examine la mobilisation, dans certains pays, de l'épargne que représentent les cotisations de la sécurité sociale. La seconde partie passe en revue la politique d'investissement des organismes de sécurité sociale et l'incidence de cette politique sur le développement économique. Les cotisations au titre de la sécurité sociale, plus avantageuses que les autres impôts sur le plan de la politique intérieure, des structures administratives et de l'élasticité par rapport aux revenus, peuvent fournir un surcroît d'épargne contribuant à l'expansion économique des pays qui ont institué des programmes consolidés de caisses de retraite et de prévoyance. Les programmes non consolidés sont généralement moins favorables à la mobilisation de l'épargne. Les programmes de sécurité sociale trop ambitieux par rapport aux ressources disponibles peuvent réduire l'épargne. Dans un certain nombre de pays en voie de développement (parmi les 30 qui ont été étudiés), les programmes de sécurité sociale ont réussi à mobiliser un volume considérable d'épargne. L'épargne nette a dépassé 4 pour cent de l'investissement intérieur brut dans 8 pays, où elle s'est échelonnée entre 4,4 et 23,5 pour cent, et a representé de 0,4 à 4,2 pour cent du produit national brut (PNB). Dans d'autres pays, l'épargne a été faible; d'autres encore avaient institué des programmes de sécurité sociale qui semblaient entraîner une désépargne. Le champ d'application restreint des programmes consolidés, l'importance des prestations, le non-paiement des versements des employeurs (et notamment de l'Etat) et l'inflation expliquent que ces pays n'aient pas réussi une mobilisation plus importante de l'épargne. Dans un certain nombre de pays, les secteurs qui cotisent à la sécurité sociale ont accumulé des avoirs considérables. Dans 13 pays (sur 27 pays étudiés), le rapport entre ces avoirs et le PNB s'est échelonné entre 6,5 et 20,6 pour cent. Ces avoirs constituaient pour la plupart un élément de la dette publique, élément qui représentait 100 pour cent du total de cette dette dans 6 pays et plus de 50 pour cent dans 3 autres. Le rendement économique des ressources de la sécurité sociale placées en fonds d'Etat est difficile à évaluer. Dans d'autres investissements, les objectifs des organismes de sécurité sociale sont souvent entrés en conflit avec ceux du développement économique. Au-delà de certaines limites, l'affectation de fonds au logement peut compromettre le développement économique; l'affectation de fonds au crédit mobilier peut entraîner une redistribution injustifiée d'avoirs parmi les cotisants. Par contre, les investissements consacrés aux entreprises privées ou publiques peuvent accroître la production ultérieure et donner un bon rendement, surtout lorsqu'ils sont effectués par l'intermédiaire d'une société financière de développement. /// La primera parte de este trabajo tiene por objeto evaluar la movilización del ahorro proveniente del seguro social en determinados países. La segunda parte examina las políticas de inversión que siguen las instituciones de seguro social y la influencia que esas políticas ejercen sobre el desarrollo económico. Las contribuciones al fondo de seguro social, que en relación con otros tipos de contribuciones presentan las ventajas de ser políticamente factibles, fáciles de administrar, y de un alto grado de elasticidad en función del ingreso, pueden ser fuente de nuevos ahorros para la expansión económica de los países en desarrollo que cuentan con programas de inversión para los fondos acumulados por concepto de jubilación y de previsión social. Los programas de fondos circulantes sin respaldo financiero de esa índole ofrecen probablemente menos posibilidades para la movilización del ahorro. Los programas de seguro social demasiado ambiciosos en relación con los recursos de que disponen, pueden contribuir a reducir el ahorro, al tener que hacer ingentes demandas sobre los activos con que cuentan los programas con la garantía de fondos acumulados, y sobre el presupuesto del gobierno. Según este estudio, los programas de seguro social lograron en general movilizar con éxito el ahorro en varios de los 30 países en desarrollo que aquí se analizan. En ocho de ellos el ahorro neto representó más del 4 por ciento de la inversión interna bruta pues el monto del mismo osciló entre el 4,4 y el 23,5 por ciento, y entre el 0,4 y el 4,2 por ciento en relación con el producto nacional bruto (PNB). El ahorro de otros países fue insignificante y hubo algunos cuyos programas de seguro social registraron desahorros. Factores tales como la cobertura limitada de los programas con fondos de garantía acumulados, las considerables prestaciones que se pagaron, la falta de pago de los aportes patronales (e incluso del gobierno), y la inflación, contribuyeron a frustrar la movilización de un volumen importante de ahorros. Las instituciones de seguro social de varios países acumularon activos considerables. En 13 de los 27 países que se analizan la relación entre esos activos y el PNB fue entre el 6,5 y el 20,6 por ciento. En su mayoría dichos activos estaban constituidos por títulos de la deuda pública, al grado que en seis países esas inversiones representaron el 100 por ciento del total de sus inversiones y en otros tres países, el 50 por ciento. La productividad económica de los recursos de seguro social invertidos en la deuda pública es difícil de evaluar. En lo que respecta a otras inversiones han surgido a menudo conflictos entre los objetivos de las instituciones de seguro social y los del desarrollo económico. Cuando se sobrepasan ciertos límites, las asignaciones de recursos para la construcción de viviendas pueden poner en peligro el desarrollo económico, y la asignación para préstamos personales puede acarrear una redistribución injustificable de bienes entre los contribuyentes; en cambio, las inversiones en empresas privadas y públicas, además de servir para incrementar la futura producción rinden buenas utilidades, sobre todo cuando se colocan a través de un banco de fomento del capital.